“Una empresa es sostenible si ha adaptado sus prácticas para el uso de recursos renovables y se responsabiliza por los impactos ambientales y de derechos humanos de sus actividades. Esto incluye empresas que operan de manera socialmente responsable y protegen el medio ambiente. (Wikipedia)”
El 50% de los humedales del mundo se han perdido en los últimos 100 años.
El 50% de los bosques del mundo han sido talados.
El 70% de las principales pesquerías marinas del mundo se han agotado.
El 100% de los arrecifes de coral del mundo están en peligro.
Con el afán por estimular el crecimiento económico de las empresas a nivel global, se han creado muchos desequilibrios en el ecosistema, tanto que está en juego la propia supervivencia de nuestro planeta. Por ello, los términos sostenibilidad y responsabilidad social corporativa están más presentes en la sociedad y, por tanto, en las empresas. Es un hecho que cada vez más organizaciones se dan cuenta de la importancia de ser responsables con el medio ambiente y de actuar de manera sostenible -ejemplos: Grupo Bimbo, Grupo Modelo, Cemex, Mc Donald´s, Coca Cola o Nestlé-. Sin embargo, ¿es posible una coexistencia sostenible entre ecología y empresas?
La respuesta es sí. Pero para ello, las empresas deben ser conscientes de que su actividad tiene un impacto en el medio ambiente y en la sociedad en general. Por lo tanto, deben tomar medidas para reducir su huella ecológica y contribuir al desarrollo sostenible.
Entre las medidas que las empresas pueden tomar para ser más sostenibles, destacan las siguientes:
- Utilizar energías renovables en sus procesos productivos.
- Reducir el consumo de energía y de agua.
- Fomentar la economía circular y la reutilización de materiales.
- Diseñar productos y servicios sostenibles.
- Realizar una gestión responsable de los residuos.
- Contribuir al desarrollo de la comunidad local.
- Promover la educación y conciencia ambiental en sus trabajadores y clientes.
Sin embargo, todavía hay mucho por hacer. Aunque muchas empresas están comprometidas con la sostenibilidad, otras muchas no lo están y siguen teniendo un impacto negativo en el medio ambiente. Es por ello, que es importante seguir fomentando la educación y la concienciación en materia de sostenibilidad y preservación del medio ambiente, tanto en la sociedad como en el ámbito empresarial y educativo.